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La quiropráctica es una alternativa de tratamiento no invasiva y natural para aliviar dolores asociados a trastornos musculoesqueléticos. Especialistas quiroprácticos están regulados a nivel estatal y entrenados en anatomía, fisiología y bioquímica. La técnica ha demostrado eficacia en el tratamiento del dolor lumbar y cervical crónico, sin embargo, no se ha comprobado que sea más eficiente que la medicina convencional.

Conceptos clave sobre quiropráctica

La quiropráctica es una práctica médica alternativa enfocada en el diagnóstico y tratamiento de trastornos mecánicos en el sistema musculoesquelético. En esta sección presentamos algunos de los conceptos clave para entender y valorar la quiropráctica.

Definición de quiropráctica y su historia

La quiropráctica se originó en Estados Unidos a finales del siglo XIX, cuando el fundador de la disciplina, Daniel David Palmer, desarrolló una técnica de manipulación vertebral para tratar a los pacientes. Según la quiropráctica, el cuerpo tiene la capacidad de curarse a sí mismo siempre y cuando sea tratado adecuadamente. Actualmente, la quiropráctica se ha extendido a nivel mundial y se considera una alternativa natural para tratar algunos problemas de salud.

Formación y requisitos para ser quiropráctico

Para ser un quiropráctico certificado se requiere un programa de formación especializado que incluya alrededor de 4 a 5 años de estudio con una cantidad mínima de 4,200 horas en el aula, laboratorio y experiencia clínica. Estos profesionales reciben formación en disciplinas médicas básicas como anatomía, fisiología y bioquímica, entre otras. La formación es crucial para que un quiropráctico sea capaz de manejar problemas de columna vertebral y sistema nervioso con técnicas naturales y sin intervenciones quirúrgicas ni fármacos.

Diferencia entre quiropráctico y médico convencional

La diferencia principal entre un quiropráctico y un médico convencional radica en su enfoque y metodología de tratamiento. Mientras que un médico convencional utiliza técnicas farmacológicas y cirugía, un quiropráctico se enfoca en el uso de técnicas y maniobras manuales para tratar y prevenir trastornos mecánicos musculoesqueléticos. En este sentido, la quiropráctica se presenta como una alternativa no invasiva, complementaria o alternativa al tratamiento médico convencional.

Tratamientos quiroprácticos efectivos

La quiropráctica es una técnica que busca aliviar dolencias musculoesqueléticas mediante ajustes y manipulaciones. Aunque el tratamiento quiropráctico ha sido objeto de debate sobre su eficacia, estos son algunos de los trastornos que se ha demostrado que pueden tratar con éxito los quiroprácticos:

Dolor lumbar crónico y su tratamiento en quiropráctica

El dolor lumbar crónico es un trastorno que afecta a muchas personas en todo el mundo y puede ser causado por muchos factores. Una revisión de 2017 encontró que la quiropráctica es más efectiva que los tratamientos convencionales, como los analgésicos, en el alivio del dolor lumbar crónico. Los quiroprácticos utilizan técnicas de ajuste y manipulación para mejorar la movilidad de la columna vertebral y reducir la inflamación. Además, los quiroprácticos pueden recomendar programas de ejercicios y cambios en el estilo de vida para ayudar a reducir el dolor lumbar crónico.

Tratamiento para el dolor de cuello y de cabeza

El dolor de cuello y de cabeza es uno de los trastornos más comunes que trata la quiropráctica. Los ajustes quiroprácticos pueden reducir la tensión en los músculos del cuello, mejorar la movilidad de la columna vertebral y reducir la inflamación. En varios estudios se ha demostrado que los ajustes quiroprácticos son una opción efectiva para el tratamiento de dolores de cabeza y de cuello. Además, los quiroprácticos pueden proporcionar ejercicios y recomendaciones de estilo de vida para prevenir o reducir el dolor de cuello y de cabeza.

Tratamiento de osteoartritis y hernia discal en columna vertebral

Los quiroprácticos también tratan pacientes con problemas de osteoartritis y hernias de disco, dos condiciones que a menudo resultan en dolor crónico de espalda. La quiropráctica introduce técnicas de ajuste y manipulación suaves para mejorar la movilidad de la columna vertebral, reducir la inflamación y aumentar la función articular. También pueden proporcionar recomendaciones para ejercicios y cambios en el estilo de vida para minimizar el dolor de espalda. Si bien la quiropráctica no es una cura para estas condiciones, puede proporcionar alivio a largo plazo y un mejor control del dolor.

Manipulación y riesgos asociados

La manipulación quiropráctica es una técnica que puede producir efectos adversos transitorios moderados o leves. Aunque la incidencia de complicaciones graves es probablemente rara, no se conocen los datos reales debido a que la gran mayoría de los casos no se comunican ni documentan en la literatura médica.

Efectos adversos de la manipulación quiropráctica

  • Molestias en el área tratada posterior a la manipulación quiropráctica.
  • Moretones y pequeñas contusiones bajo la piel.
  • Dolor o rigidez muscular posterior a la manipulación.
  • Cefalea y mareo después de la manipulación cervical.

Precauciones y recomendaciones para minimizar riesgos

  • Informar al quiropráctico de cualquier condición médica previa y si se toman medicamentos con regularidad.
  • Se deben evitar las manipulaciones quiroprácticas en pacientes con enfermedades degenerativas graves.
  • Los ajustes quiroprácticos con un rango de movimiento suave son más seguros que los que producen un rango de movimiento más brusco.
  • El quiropráctico debe proporcionar una explicación clara y detallada del procedimiento de manipulación antes de realizarlo.

Quiénes pueden beneficiarse de los ajustes quiroprácticos

Los casos más adecuados para la manipulación quiropráctica son los pacientes con dolor de espalda común, simple o inespecífico, así como para el dolor de cuello, de cabeza y otros problemas derivados de un mal funcionamiento del sistema nervioso y columna vertebral (mareos, vértigo, fibromialgia). Es recomendable que los pacientes se realicen una evaluación médica antes de acudir a un quiropráctico, para descartar posibles afecciones.

Quiroprácticos en la Ciudad de México

Si vives en Ciudad de México y sufres de dolores musculares y problemas de columna vertebral, puedes encontrar una solución en los quiroprácticos especializados en la ciudad. A continuación, te presentamos información sobre los mejores quiroprácticos y clínicas en Ciudad de México, así como recomendaciones para pedir cita con ellos.

Profesionales quiroprácticos especializados en enfermedades de la columna vertebral y sistema nervioso en Ciudad de México

En la Ciudad de México, hay varios quiroprácticos especializados en enfermedades de la columna vertebral y sistema nervioso. Estos profesionales están capacitados para diagnosticar y tratar trastornos mecánicos musculoesqueléticos, como dolor lumbar, dolor de cuello, osteoartritis, hernias discales y otros problemas derivados de un mal funcionamiento del sistema nervioso y columna vertebral (mareos, vértigo, fibromialgia).

Los profesionales quiroprácticos tienen una formación de 4 a 5 años en ciencias médicas básicas, incluyendo anatomía, fisiología y bioquímica, además de experiencia clínica. Algunos de los quiroprácticos más reconocidos en Ciudad de México son:

  • Dr. Mario Pérez, especializado en nervio ciático y hernias discales.
  • Dra. Laura Hernández, especializada en dolor de cuello y su relación con la postura
  • Dr. Fernando Castañeda, especializado en el dolor de espalda común o simple, así como en la relación de los problemas alimentarios con el sistema nervioso

Mejores clínicas quiroprácticas en la Ciudad de México

Si prefieres acudir a una clínica en lugar de un especialista, hay varias opciones en Ciudad de México. La Mayo Clinic está presente en varios estados de México, y ofrece información detallada sobre quiropráctica, así como recursos específicos sobre cómo prepararse para el procedimiento y los resultados que se pueden esperar. Si prefieres clínicas independientes, algunas de las opciones más recomendadas son:

  • Quiropraxia, ubicada en la colonia Roma Norte. Ofrece servicios de masoterapia, fisioterapia y acupuntura.
  • ChiroCare, con varias sedes en Ciudad de México (Polanco, Santa Fe y Tlalpan). Ofrecen servicios quiroprácticos y servicios de medicina deportiva.
  • Atlas Quiropráctica, ubicada en la colonia Juárez. Ofrece servicios quiroprácticos y masajes.

Pide cita con un quiropráctico en la Ciudad de México

Para pedir cita con un quiropráctico en Ciudad de México, es recomendable buscar en línea los profesionales o clínicas cercanas a tu ubicación. Algunos profesionales ofrecen la opción de pedir cita en línea, mientras que otros sugieren llamar para agendar una cita. No olvides preguntar por las formas de pago, ya que algunos quiroprácticos aceptan seguros, mientras que otros solamente aceptan pagos en efectivo o con tarjeta. Asegúrate de proporcionar al quiropráctico toda la información necesaria sobre tu historial médico, para que pueda evaluar tu situación de manera segura y efectiva.

Alternativas a la quiropráctica

Aunque la quiropráctica puede ser efectiva para el tratamiento de diferentes dolores de espalda, no es la única opción disponible. Hay otras alternativas a considerar:

Comparación entre quiropráctica, fisioterapia y osteopatía

  • Fisioterapia: el fisioterapeuta utiliza técnicas de ejercicio, masajes, manipulaciones, electroterapia y termoterapia para reducir el dolor, mejorar la movilidad y el funcionamiento de las articulaciones y reducir la inflamación. La terapia también implica educación para la prevención del dolor y mejoramiento de la salud en general. A diferencia de la quiropráctica, la fisioterapia se enfoca en todo el cuerpo y no solo en la columna vertebral.
  • Osteopatía: los osteópatas se centran en corregir disfunciones en el cuerpo, que pueden provocar dolor, malestar o inhibición del movimiento. Existen tres principios básicos en la osteopatía:
    1. El cuerpo humano es una unidad.
    2. La estructura y la función se relacionan mutuamente.
    3. El cuerpo humano tiene la capacidad de autorregularse y curarse.
    A través del tratamiento manual, el osteópata busca corregir cualquier disfunción en el cuerpo que pueda estar causando dolor. La osteopatía es similar a la quiropráctica, aunque se enfoca en trabajar con todo el cuerpo y no solo en el área del dolor.

Estilo de vida saludable y su impacto en la salud de columna

  • Ejercicio: La actividad física regular puede reducir el dolor en general y mantener la columna vertebral saludable y en forma. Se recomiendan ejercicios de baja intensidad, como nadar, hacer caminatas o pilates para mantener la columna vertebral saludable.
  • Postura: Mantener una buena postura puede reducir el dolor de espalda y prevenir lesiones. Para mantener la postura adecuada, es necesario sentarse y pararse correctamente y evitar apoyar la cabeza en el cuello. También se pueden utilizar almohadillas o cojines de respaldo para soportar la espalda baja.
  • Manejo del estrés: El estrés también puede causar dolor de espalda. Aprender a manejar el estrés mediante meditación, yoga o terapia cognitivo-conductual puede ayudar a reducir este tipo de dolor.

Terapias integrativas para el tratamiento del dolor de espalda

  • Acupuntura: La acupuntura es una terapia alternativa que ha demostrado ser efectiva para tratar el dolor de espalda crónico. Los especialistas insertan agujas finas en puntos estratégicos de la piel para liberar la tensión en los músculos y mejorar la circulación sanguínea. Se ha demostrado que la acupuntura es efectiva para reducir el dolor y mejorar la movilidad en la columna vertebral.
  • Quiropráctica: Aunque la quiropráctica es una alternativa para el tratamiento del dolor de espalda, no es la única opción disponible. A diferencia de otras terapias, la quiropráctica se concentra en la corrección de los trastornos mecánicos en el sistema musculoesquelético que pueden provocar dolor.
  • Terapia de masaje: La terapia de masaje se enfoca en reducir la tensión muscular y promover la relajación y el bienestar. También puede mejorar la circulación sanguínea y reducir la inflamación en los músculos, lo cual puede ayudar a aliviar el dolor de espalda.

Al evaluar estas alternativas a la quiropráctica, es importante hablar con un médico o un especialista en el dolor de espalda para entender qué opción es mejor según cada caso en particular y cuál puede brindar un alivio efectivo.

Garantía de calidad y certificación de especialidad

La quiropráctica es una profesión regulada en Estados Unidos, y la obtención de la licencia profesional a nivel estatal requiere un examen nacional y una formación continua. Los quiroprácticos también pueden optar por obtener una certificación de especialidad a través de organizaciones acreditadas, como el Consejo Nacional de Examinadores de Quiroprácticos (NBCE) en Estados Unidos.

Certificaciones oficiales de especialidad en quiropráctica

La certificación de especialidad se centra en áreas específicas de la quiropráctica, como la quiropráctica pediátrica, la medicina deportiva y la quiropráctica ortopédica. NBCE ofrece certificaciones en seis áreas diferentes, y los quiroprácticos interesados en obtener una certificación deben cumplir con los requisitos de formación y experiencia adecuados.

Garantía de calidad y evaluación de resultados en quiropráctica

Los quiroprácticos también pueden ser evaluados por organizaciones independientes de acreditación y calificación en cuanto a la calidad de su práctica y resultados del tratamiento. Iniciativas como el Programa de Evaluación de la Práctica Quiropráctica (PEP) en Estados Unidos trabajan para medir la calidad y eficacia de los servicios quiroprácticos y ofrecer información a los pacientes sobre los proveedores de atención quiropráctica.

Legitimidad de quiroprácticos en Estados Unidos, Italia y Reino Unido

Los quiroprácticos están reconocidos oficialmente y regulados en Estados Unidos, Italia y Reino Unido, por lo que es importante asegurarse de que el profesional quiropráctico que se elija este debidamente registrado y cumpla con los requisitos de formación y experiencia adecuados. En otros países, como México, la quiropráctica aún no está regulada, por lo que es importante buscar un quiropráctico que haya recibido una formación adecuada y tenga una buena reputación profesional.

Información adicional sobre quiropráctica

En esta sección se presentan datos adicionales a tener en cuenta para quienes desean obtener más información sobre la quiropráctica.

Diccionario médico de telemedicina para quiropráctica

Existen recursos útiles en línea, como el Diccionario Médico de Telemedicina, que pueden resultar muy útiles para consultar términos de quiropráctica, e incluso para encontrar una clínica quiropráctica en la zona.

And Research: investigaciones sobre la eficacia de la quiropráctica

Las investigaciones realizadas hasta la actualidad muestran que la quiropráctica puede ser efectiva en el tratamiento de ciertos dolores, como el dolor lumbar crónico y el dolor de cabeza tensional.

Un estudio realizado por la revista científica Spine encontró que los pacientes con dolor lumbar crónico que recibieron atención quiropráctica experimentaron una mejoría significativa en su dolor y su capacidad funcional, en comparación con los pacientes que recibieron atención médica convencional.

Pese a esto, existen algunas limitaciones en el análisis de las investigaciones científicas debido a la complejidad y la falta de homogeneidad en la quiropráctica.

Es importante destacar que la quiropráctica no se ha comprobado como una alternativa más efectiva que la medicina convencional, y es recomendable que busques la opinión de un profesional de la salud antes de optar por un tratamiento quiropráctico.

Zona privada y Sistema de número de privada en clínicas quiroprácticas

Es importante mencionar que en las clínicas quiroprácticas, el acceso a la zona privada se realiza mediante un código especifico en el que se selecciona el número de privada para brindar una revisión medica consultada por el paciente. Asimismo, algunas clínicas tienen un sistema de número de privada para agilizar el proceso de atención al paciente.

¿Cómo elegir una clínica quiropráctica en la Ciudad de México?

  • Buscar clínicas con quiroprácticos certificados en su especialidad y acreditados por organismos oficiales.
  • Leer reseñas y opiniones de clientes previos.
  • Investigar sobre las técnicas utilizadas por la clínica y sus resultados esperados.
  • Asegurarse de que la clínica cuenta con medidas de prevención y control de infecciones.
  • Comprobar si la clínica dispone de servicios de diagnóstico por imagen y laboratorios.

Precauciones y recomendaciones para minimizar riesgos durante la quiropráctica

  • Informar al quiropráctico sobre cualquier problema de salud previo antes de comenzar cualquier ajuste quiropráctico.
  • Evitar la quiropráctica si se ha sufrido una fractura, infección o tumor en la columna vertebral.
  • Asegurarse de que el quiropráctico tenga conocimientos de anatomía y fisiología del cuerpo humano.
  • Evitar tratamientos quiroprácticos si se está tomando algún medicamento que pueda influir en la coagulación de la sangre.
  • Seguir siempre las recomendaciones del quiropráctico en cuanto a la frecuencia de los tratamientos.

Quiénes pueden beneficiarse de los ajustes quiroprácticos

  • Aquellas personas que sufren dolores de espalda crónicos o agudos.
  • Pacientes con dolores de cuello o de cabeza que no han mejorado con otras terapias.
  • Personas que han sufrido una lesión en la columna vertebral o en las articulaciones.
  • Aquellas personas que buscan alternativas naturales a la medicación y la cirugía.
  • Pacientes que quieren mejorar su calidad de vida y prevenir futuras lesiones en la columna vertebral.

La quiropráctica es una técnica que puede aportar grandes beneficios a aquellas personas que sufren dolores de espalda, cuello o cabeza. Sin embargo, es importante elegir un quiropráctico certificado y tomar ciertas precauciones para minimizar los riesgos asociados a la manipulación quiropráctica. Además, no todas las personas pueden beneficiarse de esta técnica, por lo que siempre se debe consultar con un profesional de la salud antes de comenzar cualquier tratamiento.